argentina-185080-1222982561016376-9-thumbnail-4A partir de 1850, los aspectos determinantes de la situación política y social en la Argentina estaban marcados por dos temas básicos: inmigración y colonización, cuya interrelación emana de la problemática europea, en consecuencia, no es exacto considerar que la inmigración y posterior colonización de una vasta zona del territorio nacional sea  fruto de una especie de milagro concebido por la genialidad de políticos argentinos. No obstante, el país y los políticos del momento aprovecharon la coyuntura internacional para incluir a  la Argentina en el esquema de la División Internacional del Trabajo. Por lo cual, a partir de allí, el destino sería el de producir únicamente granos y, en menor medida, carnes. Pero para ello, los gobiernos liberales de la época debieron realizar distintos procedimientos, y los más importantes fueron:

-Implementación del ideario liberal, ejecutado a sangre y fuego, donde se aniquiló toda resistencia, esencialmente en el interior del país. Por consiguiente, Vicente “Chacho” Peñaloza, Felipe Varela y López Jordán, junto al gauchaje, fueron los últimos abanderados de una Argentina que se extinguía para reaparecer más tarde con una nueva identidad política, económica  y social. Este período denominado por la historia oficial Presidencias Históricas, comprende desde 1862 al 1880, y fueron tiempos en que el gobierno preparó el “proyecto del 80”, por el cual se concretó finalmente la “Organización Nacional”, con el propósito básico de crear las condiciones adecuadas para que el capital extranjero pudiera confiar en la paz del país.

-Obtención de mano de obra, necesaria para convertir a nuestras extensas pampas en próspera llanuras, dado que poseían  clima y suelo ideal para la producción de materias primas. Pero faltaba la fuerza laboral, que paulatinamente se fue cubriendo con los inmigrantes europeos y en especial con los italianos, quienes debieron efectuar la tarea más dura y peor remunerada de todo el circuito económico. El proceso colonizador no fue homogéneo, pues las mejores tierras ubicadas en la provincia de Buenos Aires, ya tenían dueños, se trataba de la oligarquía terrateniente. En consecuencia, los inmigrantes debieron ocupar tierras marginales de escaso valor económico y asoladas por el indio, cuya explotación se realizaba a través de contratos leoninos, con una duración de tres años y al cabo de los cuales estaban obligados a dejar el terreno sembrado con alfalfa.

-Infraestructura, útil para el traslado de la producción, y en nuestras pampas no había caminos, pues solo existían algunas sendas de la época colonial y que respondían a una realidad totalmente diversa a aquella de la colonización. Sin embargo, con el desarrollo explosivo del ferrocarril, que unía los principales centros de producción con el puerto de Buenos Aires, se solucionó en buena medida el factor fundamental, que consistía en el intercambio de mercaderías y el traslado de las personas. Por otra parte, pocos eran los inmigrantes que conocían las técnicas de cómo trabajar la tierra para el cultivo extensivo, y peor aún  con la carencia de herramientas apropiadas. Por ejemplo, durante la década 1870-1880, los colonos tuvieron serios problemas de recolección por falta de brazos  para cumplimentar la tarea agrícola. Entonces, los múltiples  inconvenientes que se presentaban en los primeros tiempos, demandaron de aquellos inmigrantes un durísimo esfuerzo, además de un carácter templado que no todos ellos poseían. No obstante las cosas mejoraron, y ya por el 1890, importante fue la cantidad de implementos agrícolas que ingresó al país, con los cuales de a poco fueron mejorando las condiciones iniciales.

Por último, es menester aclarar que el presente desarrollo se refiere únicamente a la incidencia que el fenómeno denominado “Organización Nacional” tuvo sobre el proceso de Colonización agraria en la Argentina. Porque la historia no se acepta como una sucesión de hechos aislados y relevantes, ni de personajes exclusivos o excluyentes. La historia la construyen los hombres viviendo en sociedad. Luego, el objetivo consiste en estudiar el pasado para comprender las verdaderas  razones  de una estructura política, social y económica que hoy en día comanda nuestro destino como país.